domingo, 11 de julio de 2010

Aproximación al tiempo de Fidel Betancourt (1897 - 1987)

Comentarios al correo: fundafibe@gmail.com

II ENCUENTRO NACIONAL DE LA CULTURA
LLANERA “JOSÉ LEÓN TAPIA”
BARINAS, 10 AL 13 DE DICIEMBRE DE 2009

“EN EL MARCO DE LA CELEBRACIÓN DE LOS 150 AÑOS DE LA
BATALLA DE SANTA INÉS Y HACIA LA CONMEMORACIÓN DE LOS
200 AÑOS DE LA DECLARACIÓN DE INDEPENDENCIA DE
VENEZUELA”.













APROXIMACIÓN AL TIEMPO DE FIDEL BETANCOURT
(1897 – 1987)










                                   AUTORA: Italia J. Cámpora Betancourt
                                   DIRECCIÓN: Av. Olmedilla Nº 5-50 Barinas
                                   TELÉFONOS: 0416-1050290 y 0414-5018092. 
                                                            Tele-fax. 0251-2613791
CORREO ELECTRÓNICO: italiacampora@hotmail.com
                                   AFILIACIÓN INSTITUCIONAL: Presidenta de la Fundación           
                                                                                             Fidel Betancourt


Diciembre, 2009

INTRODUCCIÓN

            Ante todo agradezco al Padre Creador, al Cielo y al Comité Organizador de este evento, por darme esta oportunidad, la cual me permite, tal como nos lo hemos propuesto en la Fundación Fidel Betancourt, revivir en el terruño barinés la imagen y el recuerdo, como historiador, de Fidel Betancourt Martínez, ilustre portonutreño quien escribió su obra magistral, como una ofrenda del estado Barinas al resto del país.  Ha sido posible escribir este ensayo biográfico, gracias al hecho de haber heredado, junto con mi hermana gemela, la más preciosa de las fortunas: su biblioteca, su archivo, sus obras inéditas.  Estos recursos materiales me han permitido escudriñar en la personalidad y en las vivencias de este gran hombre y dar forma a este trabajo que aspiro continuar y profundizar en futuros estudios.
Este historiador fue mi abuelo y mi padre, el padre que me crió.  Fue también la persona a través de la cual me aproximé a la historia y quien me enseñó a amarla.  Podría en este momento pronunciar las mismas palabras de Lucién Febvre “Me gusta la historia... tenía pegada al cuerpo desde la más tierna infancia la vocación de historiador.” (1).  Como investigadora, me propongo en primer término, mantener la objetividad y cuidar el manejo de las fuentes, labor harto difícil cuando existen lazos afectivos, pero no imposible.  Espero haberlo logrado
            En el afán de realizar un estudio científicamente elaborado, me propongo estudiar el personaje vinculándolo con la época histórica que le tocó vivir ya que como reza un proverbio árabe citado por Marc Bloch “Los hombres se parecen más a su tiempo que a sus padres.” (2)
            He dividido la vida de este historiador en varias etapas, he encontrado relativamente fácil relacionarlas con los diferentes momentos históricos de nuestro país, hecho que no resulta ser una mera coincidencia pues Betancourt fue un hombre que participó activamente en la realidad histórica que le tocó vivir y por tanto, su vida estuvo signada por los avatares de esa misma realidad.
            Resulta  para mí, un trabajo fascinante y un compromiso intelectual con la vida misma pues  este historiador ha dejado una inmensa obra inédita que nos proponemos publicar a través de una Fundación que lleva su nombre.  Su obra magistral es: Historia Militar de Venezuela (1553-1935), la cual consta de 12 volúmenes organizados en 8 tomos y que incluyen 86 planos, levantados por el autor en el terreno mismo de los hechos.  Comienza esta labor de reconstrucción desde la época de la Venezuela agropecuaria y rural, en la cual todavía, la mano diestra de la civilización petrolera no había modificado grandemente el escenario de los hechos.  Deja este historiador otras obras inéditas de importancia que también nos proponemos sacar a la luz pública. 
Fidel Betancourt es indudablemente un personaje que merece ser estudiado porque como dijera Ramón J. Velásquez en sus declaraciones para un diario regional, en la oportunidad de bautizar el primer volumen de la Historia Militar de Venezuela:   “Esta es una labor meritoria fuera de toda duda, pues más allá de las fallas que puede tener como toda obra, hay que pensar lo que significaba investigar y escribir en la soledad de Barinas, en los años 30, cuando esa pujante región era diezmada por el paludismo y la gastroenteritis que la incomunicaba con el resto del país.” (3)
            Este trabajo consta de 5 capítulos.  En el primer capítulo: “Infancia en Barinas”, a través de la descripción de algunos hechos vividos y presenciados por Betancourt Martínez se da una visión muy general de la época pre-gomecista y se explica cómo se forjó la personalidad del historiador. En el segundo capítulo: “Formación político militar”, se plantea ya la participación activa y directa de nuestro personaje en algunos hechos históricos de importancia en contra de la dictadura gomecista.  El capítulo tres: “El exilio”, nos habla de su salida forzosa del país, hacia Colombia, por causas políticas; es precisamente en esta etapa cuando comienza a escribir su Historia Militar de Venezuela.   En el capítulo cuatro: “De vuelta a la patria”, me refiero a la época post-gomecista en la cual nuestro personaje alterna la actividad del escritor con la de periodista y funda el semanario El Libertador  en Caracas. El capítulo cinco se refiere a los últimos años productivos intelectualmente de Don Fidel ya que en 1975 sufre una trombosis cerebral que luego de una larga terapia reduce toda su actividad a la publicación de algunos artículos a través de la prensa regional de la ciudad de Barquisimeto.  Es en esta etapa en la que funda y dirige la revista cultural “Varyná” en la ciudad de Barinas, mantiene una polémica cuatricentenaria con el conocido historiador barinés Virgilio Tosta y culmina de escribir su Historia Militar de Venezuela.
            Por último quiero recordar una frase de Marc Bloch: “Cuidémonos de quitar a nuestra ciencia su parte de poesía.  Cuidémonos sobre todo, como he descubierto en el sentimiento de algunos, de sonrojarnos por ello.” (4)
NOTAS
(1)     FEBVRE, Lucién. Combates por la historia.  1975. P.37
(2)     BLOCH, Marc. Apología de la historia o el oficio de historiador”. 1986 P.73
(3)     VELÁSQUEZ, Ramón J. En: El Impulso,  Barquisimeto, año LXXXVI Marzo de 1989. P. D6
(4)     BLOCH, Marc. ob. cit. P. 53

I.                   INFANCIA EN BARINAS (*)
Eran los últimos días del gobierno del Gral. Joaquín Crespo, Jefe de la llamada “Revolución Legalista, en el año 1897, cuando nace, un miércoles, 19 de marzo a las 3 de la madrugada, en  Puerto de Nutrias, Barinas, Estado Zamora (Barinas a partir de 1936) Fidel José Betancourt Martínez, hijo de Fidel José Betancourt Rangel e Inés María Martínez Rangel de Betancourt, pertenecientes a una familia de comerciantes del Estado Zamora.  En esos días, concretamente el 20 de abril, ocurre en Barquisimeto el pronunciamiento de la Candidatura del Gral. José Manuel Hernández (el Mocho Hernández) en representación de los amarillos o liberales disidentes y de los conservadores disidentes, agrupados en el partido “Liberal Nacionalista” que vino a constituirse en aquella rara mezcla de corrupción administrativa y libertades políticas, como era el gobierno de Crespo, un serio intento de reforma y oposición.
Esta familia provenía de la rama de Don  Domingo González, español, quien durante la época de la corona estuvo al servicio de la misma y más tarde abrazó la causa independentista, siendo diputado a partir del 5 de mayo de 1810.   
En 1902, cuando contaba con tan solo 5 años,  ya hablaba sobre “la guerra” con María Gilly Lavado, su compañera de clase, quien para aquel entonces era una niña de 10 años de edad, fue con ella con quien comenzó más tarde (en 1908) su recopilación  de Vocablos de Dialectos Caribes, obra publicada en 1999.   Es la “Revolución Libertadora” contra Castro, dirigida por el Gral. Manuel Antonio Matos, banquero quien con la ayuda de varias empresas extranjeras organiza una serie de levantamientos en el interior, utilizando para ello a los caudillos locales que aún se mantenían en contra del gobierno.  Esta viene a ser la última de las guerras civiles que durante tantos años afectaron a nuestro país, quedando vencido el caudillaje, con esta derrota.
Aparecen muy marcados en su mente los recuerdos de 1903, cuando irrumpen en la Guarnición de Nutrias grupos rebeldes al mando del oficial Bernardo Camacho.  Llega a la esquina de su padrino Tobías Guédez y queda completamente impactado cuando observa un muerto que como si estuviera vivo queda parado sobre la alta acera con un pie encogido, la mano derecha como en “atención militar” y sonriente.  Este era el “Bravo Pueblo” de nuestro himno, dice Federico Bolívar, recordando al padre de Don José Rafael Pocaterra.
En Abril de ese mismo año, entra en Puerto de Nutrias el Gral. Juan José Briceño, Comandante Militar del Estado Zamora, el niño se acerca y le dice: “Yo soy Castista” (no pronunciaba bien),  el Gral. le responde: “Y yo también soy Castrista”. El Gral. Briceño iba acompañado por el Oficial, Capitán Pedro Pérez Delgado, quien le da unas monedas al chico y dice al General: “Mae Santa, ya habla mucho”.  “Aquí está este Castrista amigo nuestro” dice el Gral. Briceño a sus tíos Damián y Abigaíl, cuando llega a la casa de los Betancourt a entregarles aquel niño hablachento a quien había montado en su caballo. 
En ese mismo año, cuando viaja a Dolores con su madre busca insistentemente y logra conocer, al Gral. Juan Navarrete Romero pues  sentía suma curiosidad por verlo, ya que ha oído decir que conoció al Gral. Páez y que fue subalterno del Gral. Ezequiel Zamora y del Gral. Falcón.  .  Años más tarde volvería a verlo en Puerto de Nutrias y ya en su labor de reconstrucción de los hechos históricos obtuvo de él la relación de la Batalla de Santa Inés y la verdad sobre el lugar en que se dio la Primera Batalla de Carabobo, la de 1814, que fue el Alto de Las Manzanas. 
Estas vivencias experimentadas  durante los primeros años de vida y la experiencia familiar de haber crecido en un ambiente poblado de reminiscencias y recuerdo heroicos, indudablemente fueron forjando su personalidad y su vocación de historiador y amor por la patria.  En los cuentos que escuchaba, los personajes no eran seres fantásticos, imaginarios e irreales, era, su padre, quien había participado en los movimientos de principios del siglo xx, su abuelo, Damián Betancourt, prócer federal, “el Catire Damián”, “El mapa de Barinas”, el hombre que orientó el avance de Zamora en la Batalla de Santa Inés.  Eran también su bisabuelo el Gral. Domingo Antonio Betancourt, sus tíos abuelos: el Gral. Donato Antonio Betancourt, muerto heroicamente el 11 de diciembre de 1859 en “El Bostero”; el Gral. José María Betancourt y el Gral. y prócer federal Francisco Betancourt.
Ocurre una invasión por Arauca y con esto el Asalto y combate de Nutrias de Setenta y Corozopando.  En relación con este hecho recuerda nuestro personaje el “Velorio” del Coronel Barrueta en la casa de enfrente de su abuela Francisca María de Betancourt, en Nutrias.
Entre sus maestros recuerda a la Niña Juana Bastidas en Barinitas y los maestros Contreras y Cedeño en Nutrias.
 En 1908, sus tíos Damián Betancourt y Abigaíl Martínez de Betancourt, reabren su negocio en Nutrias, con apoyo de la Casa Blohm, hecho éste que no resultaba ser algo excepcional puesto que en aquella época el comercio exterior era manejado por casas y agencias comerciales extranjeras y este tipo de inversiones representó la primera forma de colocación del capital extranjero en el país, elemento  que “contribuirá a acelerar la aparición de un nuevo orden en las relaciones políticas.” (1).  Fidel José, quien contaba con 11 años, trabaja con ellos y comienza a adquirir experiencia como comerciante.
En relación a Puerto de Nutrias, es bueno señalar que en aquella época (últimos años del Siglo XIX, primeros del Siglo XX) no era ya el puerto de importancia que se destacó en el activo tráfico comercial entre Barinas y Guayana, luego de finalizada la Guerra de Independencia.  Esta población que había comenzado a formarse a orillas de la margen izquierda del Río Apure y que fue escenario, junto con otras poblaciones llaneras, de la sociedad patriarcal de los llanos, como la llama Domingo Alberto Rangel, (2) no era ya el Puerto floreciente de mediados de siglo (2).
Muy cerca, a escaso 1 km., se encontraba  Ciudad de Nutrias la cual continuaba siendo un importante centro de operaciones comerciales.  El fenómeno de despoblación que ocurre en Barinas y Portuguesa viene a ser una consecuencia de la emigración hacia las zonas montañosas cercanas en donde se estaba sembrando café y cacao.
NOTAS
(*) Este trabajo biográfico, esta historia de vida del historiador Fidel Betancourt tiene como fuente muy importante un trabajo autobiográfico del autor: BETANCOURT, Fidel.  Federico Bolívar.  s.p.i
(1)        VELASQUEZ, Ramón J. La caída del Liberalismo Amarillo.  P.X. Explicación
(2)        Domingo Alberto. Capital y Desarrollo.  Tomo I. P. 83

I.               FORMACIÓN POLÍTICO – MILITAR
Contexto Histórico.
            Es la etapa de la Venezuela agraria y puede definirse en esta fase, como un país subdesarrollado en fase de crecimiento muy simple, el cual se ubica en la periferia del sistema del capitalismo monopolista imperante mundialmente.  Los focos de desarrollo regional se producen como consecuencia de la demanda internacional de tres productos: café, cacao y oro, La demanda internacional de café imprime el desarrollo a la región de los Andes, con utilización de mano de obra proveniente de los llanos y concretamente de Barinas. El cacao comienza a cultivarse en la zona Oriental del hoy Estado Sucre, concretamente en Carúpano.  El tercer foco regional surge en Guayana en donde existen y son descubiertos los yacimientos de las minas de oro de “El Callao”. (1)  La economía venezolana va a estar basada en el comercio exterior, se inicia entonces el fenómeno de la acumulación de capitales y el de absorción de tecnología.  Con la llegada de Gómez al poder en 1908 comienzan una serie de reformas en el campo económico: se elimina el impuesto de exportación a los productos básicos, se reconocen las deudas internacionales y en  consecuencia comienza el pago sistemático de la deuda externa.  Estas medidas están orientadas hacia la recuperación económica y crean un clima de confianza para las inversiones extranjeras en el país. (2).  
            El gomecismo fue el régimen que garantizó la paz interna necesaria para la acción imperialista.  Durante el gobierno de Gómez se liquida definitivamente la resistencia caudillista y se emplean métodos de terror para crear un Estado Nacional con el apoyo que le brindan las clases dominantes urbanas, conscientes de la necesidad de la unificación nacional.  El ejército se convierte en un instrumento de represión para mantener el régimen.  (3)
Dentro de esta realidad no podemos dejar de lado los movimientos de oposición al régimen, que paralelamente a la tiranía surgían y no lograban acabar con la dictadura. 
Aspecto Biográfico.
En 1911 ya Fidel José tenía, a la edad de 14 años, su propio negocio, fundado por su tío Damián Betancourt en el caserío de Santo Domingo, pequeña población del Estado Zamora arruinada durante la Guerra de la Federación.
En 1912, en Santo Domingo, obtiene del viejo Tomás Valero, “Victorá” (4), los datos que posteriormente le van a servir para reconstruir la leyenda de las Nutrias, trabajo intelectual publicado en 1966 en la Revista Cultural “Varyná” (5).  En 1913 vuelve a Barinitas a vender mulas y ve por última vez a su madre, quien muere dos años más tarde.  “Estuve entonces con el Dr. Carlos Jiménez Rebolledo, Presidente del Estado y amigo de nuestra familia, de mi padre, compañero, en la guerra del 92 y del 98.” (6)
Fracasado comercialmente comienza a escribir su primera obra: El hijo del ahorcado, publicada en Puerto de Nutrias en cinco ejemplares manuscritos, sus originales están hoy extraviados.
En ese mismo año, 1913, reseña Don Fidel Betancourt,  del 1° al 14 de febrero, en su Historia Militar de Venezuela un hecho conocido en la historia como “La Gabaldonera”. 
En abril de 1914 su tío político Carlos Guevara, Jefe Civil de Puerto de Nutrias, le encomienda como baquiano de la región y por lo tanto digno nieto  del “Mapa de Barinas”, le entrega de una comunicación del Gral. Juan Vicente Gómez, que viene desde Maracay, para el Gral. Francisco Batalla en Santa Catalina, inicia así, sus actividades revolucionarias en contra del régimen gomecista, convirtiéndose en miembro del Cuerpo de espionaje del Cnel. Alejandro Ojeda.
En agosto se descubren sus relaciones con los revolucionarios y debe huir junto con otros fugitivos hacia El Regalo.  Posteriormente se acoge a unas garantías ofrecidas por el Cnel. Pedro Bernardino Dávila, acepta servir en el ejército y recibe instrucción militar; para octubre ya es Subteniente Instructor de reclutas.  Ante las sospechas de su doble acción política, se dirige a Arauca, Colombia y estuvo allí como asilado político. 
En 1917, en agosto, recibe del Gral. Pérez Soto  el nombramiento de maestro para “El Yagual”, el sueldo es de 50 Bs. Pero se le hace la promesa de  enviarle sobresueldo, ocupa los salones de la jefatura para economizar el gasto de local.  Organiza la escuela y la militariza “ésta es un cuartel, orden, disciplina, enseñanza del sistema castrense, paradas y toques de corneta”. (7)
Realiza una excursión con sus discípulos hacia el campo en donde tuvo lugar la Batalla de El Yagual, en 1817 y encuentra allí una bala de cañón que pesa aproximadamente 5 libras, luego envía el hallazgo al Ministerio de Educación por intermedio del Inspector de Instrucción Pública Br. J. A. Sotillo.  Permanece como maestro solo durante  un año, pero esta experiencia le va a ser muy útil en el futuro pues le sirvió como primera motivación de lo que posteriormente va a ser su labor como historiador.
En 1918 visita con Pedro Manuel Castillo y Manuel Vicente Echeverría, dos de sus 57 discípulos de “El Yagual”, el campo donde tuvo lugar en 1819 la Batalla de Las Queseras del Medio y traza un croquis después de haber localizado lo que fue el “Caño de los Murciélagos”, lo que quedaba del brazo del Río Arauca por donde cruzó el Gral. Páez y rastros de los caños “Potreritos y Marrereños”,  años después ya más preparado técnicamente rectificó este plano.
En 1919 establece contacto con el Gral. J. de la Paz Suárez, quien invocando su amistad con el Gral. Franco y con Pérez Delgado y su lealtad, honradez y deseo de servir a la patria, le pide lleve con urgencia una correspondencia al Gral. Aquiles Iturbe para el Gral. Julio Olivar, quienes estaban alzados en contra del régimen gomecista.  Es interceptado por Tomás Gonzáles, jefe de la policía de Elorza, quien por ser su amigo le deja ir y le informa que Olivar se había alzado el 6 de Mayo y había fracasado y huido hacia Arauca.
Betancourt se dirige a Arauca para encontrarse con el General Olívar y estando allí presencia la entrega de un venezolano asilado en Colombia, el señor Isaías Briceño, amarrado y amordazado por parte del comisario especial de Colombia Gral. Rafael Urdaneta, a las autoridades del gobierno venezolano, consulta con el Comité Revolucionario y en vista del peligro que este  hecho entrañaba para los miles de asilados venezolanos en Colombia hace la denuncia a través de un telegrama ante el Presidente de Colombia Marcos Fidel Suárez.
Posteriormente, se entrevistaría en San Rafael de los Llanos – Camoruco con el Gral. Olivar, luego embarca a Orocué en nave correo y luego en nave alemana se dirige a Bogotá en donde se entrevista  personalmente con el Presidente de Colombia Dr. Marcos Fidel Suárez y le rinde informe sobre la entrega de revolucionarios venezolanos, él va tomando nota de sus declaraciones.  Unos días después le visita un empleado del Ministerio de Obras Públicas llevándole una misiva para que se presentara ante el Sr. Miguel Quiñones, quien le manifiesta que el Sr. Presidente desea ayudarlo y le ofrece dos puestos a escoger, uno de oficina de 2ª. Clase y otro en Dirección Urbana en Obras Públicas.  Escribe al Presidente agradeciéndole y excusándose por no aceptar ninguno de los dos empleos por haber cambiado de planes.
En 1920 visita, acompañado de dos amigos, Alejandro Larrota y Misael Machuca, el campo en donde tuvo lugar, el 25 de julio de 1819, la Batalla de Boyacá, levanta un croquis que rectifica posteriormente, en 1924, por considerar que tenía algunas deficiencias.  Posteriormente, con el aporte de algunos amigos, entre ellos el Dr. Eduardo Santos, emprende la investigación de la Campaña del Bajo Magdalena y levanta también un croquis que igualmente rectifica años más tarde.  Continúa su gira hacia Ocaña – Cúcuta.  Existe para este año un Plan de invasión hacia Venezuela, adelantado por los Dres. y Grales. Carmelo París y Roberto Vargas en el que participará Betancourt Martínez.
En enero de 1921 traza el croquis de la Batalla de Bomboná sobre el mismo sistema de puente del Río Guaitara y conjunción del Bomboná.  El 1° de enero de 1921 reseña Don Fidel Betancourt en su Historia Militar de Venezuela el estallido de la “Revolución Constitucionalista”. (8)
Reposa en los archivos de la Fundación Fidel Betancourt copia de la alocución emitida por el Gral. Emilio Arévalo Cedeño en la mañana del 28 de enero, luego de la liberación del Territorio de Río Negro o Territorio Federal Amazonas, el cual se encontraba en manos del Gral. Tomás Funes desde el 8 de mayo de 1913, sin que el gobierno de Gómez hubiese podido recuperarlo, Es así como un grupo de  revolucionarios al mando de Arévalo Cedeño recupera este territorio y luego de haber sometido a estudio los crímenes y desmanes cometidos por Funes, se decide su fusilamiento y el de su segundo jefe Luciano López, el 30 de enero.
En marzo se considera fracasada la revolución debido a la captura del barco “ODIN” que viene del exterior con los elementos de guerra. Como consecuencia de esta acción cae prisionero el Gral. Francisco Linares Alcántara.
En los primeros días de marzo sale Betancourt de Bogotá rumbo a Orocué a incorporarse a la revolución y a reunirse con el Gral. Alfredo Franco.  Se  reúne una Junta Militar Consultiva para examinar los hechos pues no quedaban más fuerzas que las de los Llanos, comandadas por los Grales. Carmelo París y Roberto Vargas y se resuelve bajar por el Orinoco hacia Guayana y el Guárico a fin de aprovechar la situación victoriosa de Río Negro y la acción de las tropas ansiosas de combatir.
El 1° de mayo, sale Betancourt Martínez, en nave expresa a través del Río Meta hacia Venezuela.  Continúa junto con el Capitán Isaías Bello, hacia el Hato Capanaparo donde estaba ya acampado todo el ejército revolucionario, comandado por los Grales. Carmelo París, Roberto Vargas y Arévalo Cedeño.  Luego de cumplida esta comisión, es dado de alta, de Teniente a Capitán, el 23 de mayo, por los Grales. París y Vargas y el 24 parte hacia Cravo Norte, junto con 8 hombres más, con una correspondencia para el Gral. Alfredo Franco y para Arauca para el Gral. Rojas Caballero.
En tanto, el 27 de mayo, se produce el “Combate de la Ceniza”, con una vanguardia comandada por el Gral. Pérez Delgado en donde las fuerzas revolucionarias salen vencedoras. Sin embargo, el Dr. Roberto Vargas ordena contener el avance y dar marcha atrás, hacia Centro – Apure, impidiendo así la invasión a El Guárico por considerar que el repliegue de las fuerzas del gobierno, casi sin combatir era una treta para destruirlos más adelante.
El 1° de junio llega Betancourt a Cravo Norte y hace entrega de la correspondencia que lleva al Gral. Franco quien no puede salir enseguida a ponerse al frente de las fuerzas que estaban en Alto Apure para ocupar la “Montaña de San Camilo” y detener así las fuerzas del Táchira que viniesen a reforzar aquella guarnición, por hallarse enfermo. Continúa entonces Betancourt hacia Arauca, conforme a las órdenes  privadas que llevaba, a entregar correspondencia al Gral. Rojas Caballero, para que asumiera éste la invasión ya que el Gral. Franco no podía hacerlo; pero habiéndole llegado noticias al Gral. Rojas C. del repliegue en “La Ceniza”, contesta a Betancourt en reunión de Comité: “No asumo la invasión, ni paso, esa revolución viene fracasada a morir aquí conforme a sus errores, puede Ud., con las atribuciones que trae, resolver lo que mejor crea.  No invado ni solo, ni con la gente de aquí, ni con Franco si viene” (9).

      Sigue Betancourt hacia  Arauquita a poner al tanto al Cnel. Antonio Maldonado de la concentración en Guasdualito, el 19.  El 17 de junio ocupa la plaza de Guasdualito el Cnel. Antonio Paredes Pulgar, conjuntamente con el Cnel. Ramón Peña, Jefe Civil del Distrito Páez, el 18 acampan en las afueras, la fuerzas revolucionarias y el 19 tiene lugar la Batalla de Guasdualito.  Pérez Delgado al mando del Ala Izquierda y Arévalo Cedeño al frente del Ala Derecha.  Concurre además el Cnel. Antonio Maldonado por la vía La Victoria – Las Angosturas.  Franco quien  iba solo y como contingente llevaba los 14 hombres bajo las órdenes de Betancourt, no llega a tiempo para reunirse con las fuerzas revolucionarias pues ya el 21, estas, estaban abandonando la plaza.  La acción se pierde para la “revolución”. El gobierno conmina a la Capitulación pero las fuerzas revolucionarias se niegan a aceptara y repliegan.

El 3 de julio, Betancourt se encuentra en Elorza, continúa bajo las órdenes del Gral. París.  Ese mismo día acompañado de dos hombres de su destacamento y del Cnel. Luis Martínez, quien lleva también dos hombres, sale a petición del Gral. Franco a alcanzar al Dr. París para que regrese a Elorza pues Franco necesita enterarlo de unos “tratos” que tiene con Don Hernando Febres Cordero, Presidente del Estado Apure, París regresa inmediatamente a Elorza y el arreglo con Febres Cordero termina en una Capitulación del Gral. Franco y el Gral. Pérez Delgado.  “.. Franco capituló, no se pasó al Gobierno como hicieron muchos, que además de pasarse claudicaron de sus idas y sirvieron a la tiranía.” (10)

Para diciembre ha regresado ya Arévalo Cedeño de su Campaña del Guárico al Hato Ele, en Arauca, propiedad del Dr. París y aprovecha Betancourt de comprar algunas armas y buenas yeguas a los hombres de Arévalo.  Pone estas yeguas y armas en manos de su amigo Diego Zambrano, dueño del Hato Venero, lo hace bajo la condición escrita de que si moría en campaña quedaría como dueña de las bestias su hermana María Dolores.

En febrero de 1922 se trama otra invasión hacia Venezuela, en abril se hacen los nombramientos de cargos militares del Ejército Constitucionalista. El Capitán Fidel Betancourt va como segundo ayudante del Comando.

El 29 de mayo tiene lugar el Combate de Puerto de Nutrias  y el 12 de junio se enfrentan a las fuerzas del gobierno en el Combate de Galápagos, resultando derrotadas las fuerzas revolucionarias.  Luego de esta derrota el Capitán Betancourt sale con restos de su cuerpo y más adelante se les incorpora el Gral. Toro y les informa que tienen la probabilidad de unas garantías.  En enero de 1923 retorna al exilio a crear fondos para dedicarse a trabajar el ganado, convencido ya  de que las revoluciones no acabarían con la tiranía.

La represión en ese año se acrecienta y los movimientos revolucionarios en contra de la tiranía gomecistas ven mermada su acción especialmente después del asesinato, en el Palacio de Miraflores, del Gral. Juan C. Gómez (Juancho Gómez) cuando las crueldades y el terror del régimen gomecista toman proporciones alarmantes.

En diciembre de 1925, comienza con su labor de escribir la Historia Militar de Venezuela.

NOTAS
(1)      RANGEL, Domingo A. Capital y Desarrollo.  La Venezuela Agraria.  Tomo I. P. 80.
(2)      SILVA MICHELENA, José Agustín. Crisis de la Democracia.  1970. P.93
(3)      ZIEMS, Ángel. El Gomecismo y la formación del Ejército Nacional.  1979. P.22.
(4)      Fuente oral, que de acuerdo a las concepciones más avanzadas de la investigación histórica es plenamente legítima.  Betancourt, Fidel. La Laguna de las Nutrias. En Varyná, Barinas. Enero de 1966. P.1
(5)      BETANCOURT, Fidel. Federico Bolívar.  s.p.i.
(6)      Ibídem.
(7)      BETANCOURT, Fidel.  ob. cit.
(8)      BETANCOURT, Fidel. Historia Militar de Venezuela.  Vol. XII. s.p.i.
(9)      Tomado de: BETANCOURT, Fidel Historia Militar de Venezuela.  Vol. XII.
      s.p.i.
(10)  Ibídem.






II.                EL EXILIO (1925-1935)
A partir de 1925, Betancourt permanecerá durante varios años en el exilio, en Colombia, así como muchos hombres luchadores de su época; sin que esto significara su desvinculación con su región natal.  Inicia en esta época sus investigaciones y se propone estudiar las “Revoluciones Venezolanas” durante el Gomecismo y el Castrismo, asignándole el nombre de “Reflexiones Revolucionarias”.  Esta investigación va a ser la base de su obra magistral; Historia Militar de Venezuela.
El 24 de septiembre de 1927, a la edad de 30 años, contrae matrimonio con quien fue su esposa hasta la muerte, Cándida Rosa Quiróz, venezolana, radicada en Arauca Viene a ser ésta la compañera de su vida y la persona que calladamente y con su firme respaldo y comprensión colaboró para que Betancourt pudiera dedicarse durante largos años a la investigación histórica.
A partir del año 27 se radica en Puerto Rondón, nombre dado por él y otros venezolanos al lugar llamado El Padre, cuando iban hacia Pisba, por donde pasó El Libertador y el Gral. Santander a Pantano de Vargas.  Permanece allí y se establece el Fundo El Sol, hoy convertido en poblado.  Allí desarrolla  la actividad comercial, alternándola con sus investigaciones.  Fueron largos años de estudio y preparación, de incesantes viajes, recorriendo lugares y haciendo comprobaciones, hasta 1935, cuando estuvo listo su trabajo “Reflexiones Revolucionarias” que cubría la época Castro – Gómez.
Durante esos años realizó varias publicaciones en importantes periódicos de Colombia: Defensa Nacional, El Siglo, Gil Blas, Mundo al día, El Correo Liberal y El Tiempo, dichas publicaciones se distinguían  por su perseverante campaña en contra de la tiranía Gomecista y de sus ministros diplomáticos. 

Durante estos últimos años de la tiranía puede asegurarse que ya se encontraban liquidados los partidos políticos tradicionales que habían motorizado las luchas políticas en el siglo XIX.  Sin embargo y a pesar de que cualquier intento de oposición al régimen era sofocado inmediatamente por el gobierno, tuvieron lugar durante este lapso algunos movimientos de oposición de importancia, como fue el de la generación universitaria de 1928, semillero y germen de las agrupaciones políticas que a la muerte de Gómez emprenderían el nuevo rumbo que tomaría el país.  En 1929 tienen lugar el alzamiento del Gral. José Rafael Gabaldón quien se declara en campaña en su hacienda Monte Cristo y la expedición del Falke, comandada y organizada por el Gral. Román Delgado Chalbaud.  “El último lustro de la dictadura gomecista va a transcurrir bajo el signo de la espera... El final del tiempo gomecista parece en algunas de sus escenas centrales el drama de unos ancianos que se agarran desesperadamente a la vida.” (2)
NOTAS
(1)     VELÁSQUEZ, Ramón J. La Oposición a la Dictadura Gomecista.  Tomo II. Vol.1. P. LII. Introducción

III.             DE VUELTA A LA PATRIA. (1936 – 1958)
En 1935, tras la muerte del tirano, regresa a Venezuela la familia Betancourt Quiróz, ya aumentada en su número de miembros por el nacimiento, en 1933 de su hija Josefina.  Pasan unos días en Pedraza, Estado Barinas, en casa de Doña Mercedes Betancourt de Guevara, quien se desempeñaba como maestra de escuela en ese poblado. Un año más tarde deciden establecerse en Caracas.
En 1936, Betancourt junto con Carlos Laguado Jaimes, Federico Peña Pérez y otros constituyen, el 25 de marzo, La Junta Unionista Venezolana.  Días más tarde, mediante publicación hecha en Unidad Nacional y Ahora, el 19 de abril esta junta pasa a constituir el Partido Libertador. 
El objetivo principal de esta Junta era el de luchar por la paz, por el honor y la reconstrucción de Venezuela y estaba integrada, por “las víctimas de la tiranía,  ex prisioneros políticos e inocentes torturados; repatriados y revolucionarios en general, enemigos de aquel desorden denominado La Rehabilitación” (1)
El 24 de abril esta Junta se dirige al Congreso de la República para participar su constitución y hacer algunas peticiones que podemos resumir de la siguiente manera: el embargo de la herencia dejada por el dictador en virtud de que fue amasada con sangre y lágrimas de los hogares venezolanos; la indemnización, proporcionalmente al tiempo de cárcel y condición de salud del individuo, de todas las víctimas de la tiranía; la creación de las vicepresidencias por votación popular y no por designación; la creación del cargo de Vocero de Palacio para así contrarrestar los males que se originan especialmente de las camarillas que rodean al Presidente y lo desvinculan de la realidad; absoluto respeto a las Corporaciones Municipales y Legislativas de los Estados (2).
Este documento, enviado al Congreso, fue hecho público a través de El Libertador, semanario fundado en la segunda sesión de la J. U. V. el 7 de abril, con el fin de ser el vocero de esta Junta y del Partido Libertador.  En 1941 se funda la Asociación Venezolana de Periodistas (A.V.P.), Betancourt forma parte del grupo fundador, es el miembro N° 16.  Esta asociación, viene a ser la raíz del hoy Colegio Nacional de Periodistas (C.N.P.) y fue idea del Periodista Francisco J. Ávila,
El Libertador  se mantuvo activo hasta el año 1942, siete años de constante denuncias y trabajo político en que Betancourt estuvo en repetidas oportunidades detenido.  En ese año, debido a la escasez de papel, como consecuencia de la Segunda Guerra mundial, tuvo que cerrar sus puertas “El Libertador”.
Luego de cerrado El Libertador  Don Fidel establece una alfarería, como medio de vida, e intensifica sus trabajos de investigación, ya para 1956 tenía listos 10 gruesos volúmenes de su obra,  que abarcan los períodos 1810–1830; 1830–1900;  1900–1935.  Años después completaría sus investigaciones estudiando el período 1553 –1810. Emplea en sus investigaciones el método retrospectivo, partiendo de lo más conocido, lo  más reciente (1935 a 1901) hacia atrás y respalda sus estudios en planos de exactitud incontrovertible como una forma de demostrar gráficamente la verdad  histórica. Este trabajo de elaboración de planos es muy importante pues han sido levantados en el mismo lugar de los hechos.
En repetidas oportunidades se ha usado el término “Revolución” para referirse  a los alzamientos en contra de  Gómez, tratando de conservar el lenguaje que se usaba para la época. Revolución, como categoría implica un cambio profundo en la estructura económica, política y social.
NOTAS
(1)       “JUNTA UNIONISTA VENEZOLANA”. En: El Libertador.  Caracas. Año 1. N° 1. 25 de abril de 1936.
(2)       No hemos ceñido estrictamente al orden numérico que aparece en la publicación de El Libertador . Suponemos que el salto es un error de imprenta.

IV.             DE VUELTA A LA TIERRA NATAL.
En 1959, Betancourt decide radicarse en Barinas, animado por su sobrino Ruiz Guevara, a iniciar un negocio de explotación de madera; tal negocio no llegó a concretarse y establece un negocio de Hotelería que por varios años le sirvió para mantener a su familia.  Durante este lapso continúa sus investigaciones y su labor de levantamiento de planos, ahora con la participación activa de Ruiz Guevara.
En 1966 funda la revista cultural Varyná,   cuyo nombre se debe a la leyenda de la India Varyná publicada en su primer número y que según los testimonios orales recogidos por el autor constituye el origen del vocablo Barinas. Esta revista era de contenido netamente cultural y daba cabida en sus páginas a artículos de carácter  histórico.  Entre algunos de sus colaboradores se  encontraban el Dr. José León Tapia, el historiador J.E. Ruiz Guevara. Don Francisco Betancourt Sosa y otras notables personas del ambiente cultural de la época.
En ese mismo año, habiendo terminado ya su obra, se dirige a una serie de entidades públicas y privadas y a particulares con el fin de conseguir financiamiento para su publicación. Solo encontró eco su petición entre los particulares, en algunos portonutreños como el Sr. Luis Valderrama Ortíz y Ángel Ignacio Betancourt y algunos barineses como el Dr. José León Tapia.  Con la ayuda económica proporcionada por ellos logra publicar 2 planos de su Historia Militar de Venezuela, el de la Batalla de los Horcones y el de la Primera Batalla de Carabobo.
 Por estos días también publica un folleto: Fraudulencia en la historia (Altamira de Cáceres no es Barinas)  que origina una polémica con el académico de la historia Dr. Virgilio Tosta.  Podemos resumir las dos posiciones en los siguientes términos:
Por un lado Don Fidel Betancourt presenta pruebas en su publicación de que Altamira de Cáceres fue fundada en 1577 por Juan Andrés Varela y que Barinas fue fundada en 1628, con el nombre de Nueva Trujillo de Varinas, por Juan Pacheco de Maldonado, trasladando habitantes de Altamira de Cáceres.  Altamira sigue su vida de pueblo con los habitantes que le quedaron.  Para 1642 comienzan a trasladarse vecinos de Nueva Trujillo de Varinas, ubicada en la mesa de Moromoy,  para San Antonio de los Cerritos, lugar ubicado entre la actual Barinas y Quebrada Seca.  Por último en 1718 comienza a situarse en el lugar en donde está la actual Barinas un nuevo grupo de pobladores que se trasladan  a este sitio.  Por su parte el Dr. Virgilio Tosta afirma que el pueblo que hoy existe no es Altamira de Cáceres y que éste último es el nombre con que el Capitán Juan Andrés Varela fundó a Barinas en 1577.
Al margen de esta polémica consideramos que la labor cumplida por los historiadores Fidel Betancourt y José Esteban Ruiz Guevara en el pueblo de Altamira de Cáceres fue excepcional, ellos lograron que el pueblo saliera a la calle con pancartas a luchar por su cuatricentenario y que tomara conciencia de que el progreso del pueblo tenía que ver directamente con su pasado histórico. 
En 1971 Don Fidel sufre una trombosis cerebral que durante varios años le inhabilita para la vida intelectual, logra recuperarse y en 1975  vuelve a escribir en la prensa regional del estado Lara.
Sus últimos años los pasa al lado de su familia, de la cual recibió todo el amor, el cariño y la admiración de los que era merecedor.    Se ausenta físicamente, sin haber visto publicada su obra, el 11 de enero de 1987.  El 16 de marzo de 1989, gracias al esfuerzo económico de su hija Josefina y sus nietas Sonia e Italia y al esfuerzo intelectual de estas últimas y de la Prof. Xiomara Rodríguez Córdova, sale a la luz pública, como obra póstuma, el primer volumen de su Historia Militar de Venezuela,  la cual, gracias al apoyo de la UNELLEZ y de la Fundación El Perro y la Rana saldrá a la luz en su totalidad, muy pronto.

CONCLUSIONES


1.      Fidel Betancourt fue una persona excepcional, nace en un apartado y decadente pueblo llanero y sin embargo su sensibilidad humana y vocación histórica le permiten escribir una obra única en Venezuela: Historia Militar de Venezuela. 1553-1935.  Bien podría ser publicada su biografía y concretada la elaboración de un busto, tarea asignada a un escultor altamireño para ser colocada en un mirador en esa población, la cual hasta ahora no se ha podido realizar, por estar a la espera de recursos.  Solicito ayuda a este noble pueblo barinés para realizar estas acciones.
2.      Su participación directa en algunos alzamientos en contra de la tiranía gomecista tuvo indudablemente gran influencia en la labor que más tarde desempeñaría como historiador, pues inicia sus estudios históricos precisamente en torno a ésta época 1900–1935, cuando escribe sus Reflexiones Revolucionarias.
3.      Los largos años de exilio, duros por la lejanía de la Patria, permitieron a Don Fidel dedicarse por mucho tiempo a la investigación histórica  y en primer término a superar su condición de autodidacta nutriéndose de una amplia bibliografía
4.      Durante la época de  “El Libertador”, Betancourt vincula su actividad periodística a un importante proyecto político  que a pesar de no haberse mantenido vigente, constituyó para la época una fuerte corriente de opinión.
5.      La polémica sobre Altamira de Cáceres aún  no ha terminado, quedan algunas comprobaciones por realizar y estamos dispuestos a hacerlo hasta lograr la verdad histórica.
6.      La labor de Fidel Betancourt como historiador se prologa en el presente a través de una Fundación que lleva su nombre.









2 comentarios:

  1. Buenas noches. Disculpe la pregunta, existe alguna relacion entre Fidel Betancourt y Angel Betancourt (dueño de la Calzada Paez) ?

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  2. Quisiera saber donde puedo conseguir los tomos 1 2 4 5. 6 7. Y 8 porque tengo entendido que son 8 tomos y nada mas he leido el. Tomo 3 luchas entre las oligarquias1830 1858 he visitado aqui en caracas varias librerias del sur y mr dicen que no los tienen
    O

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